Carlos Giménez, Alfonso Font y Josep María Beá. Yo empecé a leer sus comics en 1982. Dani Futuro, Cuentos de un futuro imperfecto y En un lugar de la mente. Pioneros de la ciencia ficción española, del buen cómic español y de historias maravillosas que se acabaron a final de los ochenta. Cuesta horas encontrar su rastro en internet. No sus biografías, ni sus obras, publicadas en todos sitios; cuesta encontrar qué hacen o qué no, quizás porque ya quieren ser anónimos, a lo mejor porque lo que les dio la fama ya no existe. En el año de Iron Man o Hulk, cuando los americanos saben darle su sitio al cómic, en España ni Dios se acuerda de tiempos tan gloriosos como difíciles. Franceses, italianos, belgas e ingleses veneran a sus dibujantes, pero aquí solo tenemos a Mortadelo y Filemón. Quién se acuerda de Enric Sió, Adolfo Usero, Luis García, Antonio Hernández Palacios, Manfred Sommer, Hidalgo, Victor de la Fuente. Así nos va.